La evolución de la pesca marítima de recreo desde embarcación afecta directísimamente a los puertos, a la industria náutica, a las administraciones pesqueras, a la pesca comercial, al medio marino, al recurso pesquero, a la ciencia y al turismo. Su conocimiento tiene interés social.
La incorporación de la licencia de pesca marítima de embarcación, recomendada en la mesa del libro blanco, solicitada insistentemente a las administraciones pesqueras por todas las asociaciones del litoral mediterráneo español puesta en vigor por el Real Decreto de Pesca Recreativa en Aguas Exteriores 347/2.011 e iniciada diligentemente por la administración de las Islas Baleares y de la Comunidad Valenciana, es fundamental para disponer del censo de la flota de pesca marítima de recreo.
La licencia de Pesca Recreativa desde Embarcación facilita la gestión, porque entre otras cuestiones no menores ofrece a las Administraciones Pesqueras la comunicación con los patrones y orientar la acción extractiva de sus tripulaciones y por tanto de una gestión de los recursos pesqueros eficaz y moderna con la embarcación como unidad extractiva y su patrón como responsable de las capturas a bordo.
A destacar que permite mejorar su inspección y control en colaboración con la Dirección General de la Marina Mercante (listas 6ª y 7ª). También para los estudios de impacto económico de la flota de pesca de recreo esa colaboración es básica.
Hoy por hoy procede difundir sin complejos el concepto “pesca recreativa responsable”. (1,995 Código de conducta FAO)
En un futuro próximo pescar será sin duda un privilegio reservado a aquellos que sin renunciar a un concepto tan mediterráneo, tan español como es comer lo que se pesca, difunden el modelo de actividad lúdica desarrollada en el medio marino y respetan por convicción unas normas para que la actividad sea sostenible, solo así la pesca recreativa desde embarcación tendrá continuidad.